Desde que nacieron los audífonos personales en 1958, la forma de escuchar música cambió para siempre. A partir entonces, las personas comenzaron a utilizarlos casi a diario y, con el tiempo, su innovación tecnológica creció hasta llegar a los modelos inalámbricos que se venden en la actualidad.
Sin embargo, el uso de estos dispositivos podría llegar a ser perjudicial para la salud de los usuarios, según un especialista que aconseja continuar con los auriculares con cables.
¿Qué consecuencias podría traer el uso de auriculares inalámbricos?
«Solo personas con alta sensibilidad pueden percibir las sensaciones que emanan estas ondas, muchas veces en forma de calor en los oídos, dolores de cabeza, mareos, y alteraciones del sueño», explicó Apud.
Por otro lado, aclaró que «siguen estudiando los efectos a medianos y largo plazo de mantener EMF» cerca del cuerpo, especialmente «lo que generan en la barrera hematoencefálica. Pero se estima que podría permitir la entrada libre de toxinas en el cerebro».
«Básicamente sería como freír tu cerebro de a poco», ejemplificó el especialista y aconsejó evitar el uso de auriculares inalámbricos y «utilizar tu teléfono siempre con manos libres y lejos de tu cabeza (o con auriculares con cable)».
Para finalizar, Apud resaltó que la investigación científica en este campo continúa evolucionando y que «es importante estar atento a las actualizaciones por parte de expertos en electromagnética». Sin embargo, subrayó que se «puede prevenir antes que lamentar, si es que se confirman las hipótesis que se manejan».